Foto: Lina Vanesa López Ortiz, en Facebook
Muy difícil sería saber por dónde comenzar, nuestro país vive un momento histórico en todos los sentidos, nunca en la historia habíamos estado tan mal, pero tampoco habíamos tenido una oportunidad de cambio como la que hoy se vislumbra. Pero son tantos los problemas de la nación, que saber por donde comenzar es difícil, deberíamos comenzar por todos los frentes, pero sabemos que no podrá ser así, pero si escogemos un solo escenario, los de siempre seguirán teniendo el control de algunos terrenos y territorios. Así las cosas, se requiere de un equipo altamente dispuesto a enfrentar a la tiranía y con el suficiente compromiso para ejecutar, de tal forma que cuando seamos gobierno, no se den treguas, que los enemigos de la patria no encuentren ni un solo espacio por donde mantener sus empresas mafiosas dedicadas al narcotráfico y al robo de lo público.
Este equipo deberá estar preparado con antelación, no podemos permitirnos ganar unas elecciones para luego pensar como y con quien gobernar, es ahora el momento adecuado para seleccionar a aquellos y aquellas que después del 7 de agosto del 2022 serán los encargados de cambiar la historia de Colombia.
¿Veo con preocupación como la gran mayoría de personas cercanas al Pacto Histórico estamos empeñados en ser candidatos a cámara o senado, y entonces quienes serán los ministros, los secretarios y demás funcionarios que requiere un gobierno para precisamente poder gobernar?, es tan importante que el senado y la cámara se obtengan mayorías, como lo es también tener los perfiles adecuados para administrar en el sector ejecutivo.
El pueblo colombiano lleva muchos años de angustia esperando este momento como si se tratara de una profecía que mantiene la fe en la humanidad advirtiendo que un salvador llegará. Ahora que el momento se acerca sabemos que no se trata de un rey que montado en su caballo blanco y espada en mano salvará este país, sino que es el acercamiento de todos como pueblo lo que nos va permitir construir esta nación y derrotar a lo generadores de desigualdad que durante doscientos años nos han sumido en la miseria casi que total, tal y como se puede leer en los indicadores mundiales que nos mantiene en el pódium como el segundo país mas desigual del mundo y número uno en corrupción.
¿Es Gustavo Petro quien traerá la solución a Colombia para sus pobladores llenos de miseria y sometidos al caos de la guerra que asesina a sus hijos? Me temo que no, pero si es tal vez la persona que puede comenzar un proceso de cambio, no podemos esperar que un país sometido por una tiranía heredada de los españoles durante dos siglos, resuelva con un solo gobierno de cuatro años todas y cada una de las dificultades, lo que si estoy seguro es que un gobierno alternativo y decidido a generar dignidad es el comienzo de la gran revolución social que tanto requiere nuestro país, de ahí que debemos preocuparnos desde ya por tener senadores y representantes a la cámara altamente decididos a enfrentar los grandes debates que se requieren y decididos a presentar, discutir y aprobar los proyectos de ley necesarios, al igual que un semillero de lideres capaces de continuar en el 2026 y por muchos años mas en el camino del cambio .
Yo por mi parte, genero esta opinión desde la necesidad que reconozco haber padecido en mi infancia bajo gobiernos como el de Cesar Gaviria o Ernesto Samper, gobiernos que siendo unos más que otros, no han cambiado hasta hoy, lo que ha hecho que personas de mi edad no hayamos vivido un solo día en paz o en dignidad permanente. Los problemas de Colombia hace cuarenta años, son los mismos de hoy, el hambre de hace cuarenta años es la misma de hoy, y muchos otros problemas la población de hoy los vive con mayor frecuencia.
Los gobernantes se han dedicado a robarse nuestros recursos creando una sociedad esclava, una sociedad que trabaja, paga impuestos sobre todo lo que consume por mínimo que ese consumo sea, pero no tiene ningún derecho, ni siquiera a opinar.
Condenados a vivir en la miseria hoy nos vemos en la obligación de salir a las calles, no solo para protestar, sino para generar conciencia ciudadana y lograr un cambio de mentalidad que nos permita llegar a obtener un cambio desde las urnas, esperando con esto que aquellos elegidos no repitan la historia, pues es cierto que la incredulidad va en aumento y el miedo a que los malos gobiernos continúen es latente.
Debemos entonces generar confianza, según esto de eso se trata, que los viejos ciudadanos acostumbrados a votar por los mismos ahora miren el resultado y cambien de opinión, pero que también los nuevos ciudadanos que apenas comienzan una vida electoral esperando de ella unas posibilidades que no han visto desde que nacieron les permita comenzar bien.
Soy un hombre sin títulos académicos, lo que a la luz y la reflexión de muchos me convierte en un analfabeta, y tal vez tengan razón, pero me esfuerzo a distribuir mis pensamientos aun sabiendo que podría estar equivocado, con la única ilusión de contribuir al debate que en un momento deberá llevarnos a la victoria y al inicio de un nuevo proceso en la vida política del país que garantice a mi descendencia las oportunidades necesarias para vivir en dignidad. Si, lo hago por mis hijos, por mis dos nietos y los que vendrán, pero también por sus hijos y sus nietos, y aunque muchos no lo consideren necesario pues creen que esta democracia dictatorial es el paraíso y que somos la Suiza Latinoamericana, yo se que un día ellos y hasta usted, lo agradecerán.
He estado sentado en diversas oportunidades frente a Gustavo Petro; Paris, Bélgica y Holanda han sido nuestros lugares de encuentro lo que me ha parecido extraño, pues nunca he planeado ninguno de esos momentos. Pero la vida insistiendo lo ha permitido, he guardado silencio frente a él, entendiendo que esos espacios debían ser copados por aquellas personas que nunca habían tenido la oportunidad de expresarse frente a alguien que podría ser el próximo presidente de nuestro país. Con esto quiero decir, que estar cerca de alguien importante no te hace merecedor de nada, que son nuestras acciones y decisiones lo que debe abrir los espacios donde podamos tener alguna representatividad dentro de la vida pública.
Diferentes batallas están direccionadas a llamar la atención de los lideres de redes sociales mas importantes para que estos a su vez soliciten incluir nombres dentro del Pacto Histórico, sería mejor visitar las regiones y que los lideres sociales y la sociedad que vive en medio del padecimiento social, para que estos a su vez propongan la mayoría de hombres y mujeres que les representaran en el congreso de la república. Acabamos de nacer en la vida pública, estamos aprendiendo, debemos aprender, debemos gobernar, podemos ser gobierno.
El Pacto Histórico debe realizarse entre la sociedad, no entre políticos detrás de las cortinas de una oficina en Bogotá. Las regiones deben juntarse en el propósito de ser incluidos en la coadministración del país, las regiones deben en esta oportunidad ser las grandes mayorías que se requieren para salvar la patria, si no se construye país desde y con las regiones será imposible llegar al cambio.
Debemos tener claro que Petro no es el salvador, pero sí, la luz por donde la salvación de un país va a comenzar.
Gener Usuga
Activista político y líder social
