Por: Redacción
Esta semana la justicia francesa no obstante la incredulidad de muchos, condenó al ex presidente Nicolas Sarkozy a tres años de prisión por los delitos de corrupción y trafico de influencias, delitos punibles, sí, pero absolutamente nada que ver con la ya larga lista de aquellos por los que es acusado el ex presidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez.
A Sarkozy se le acusa de realizar un pacto entre amigos para tener información confidencial y de haber realizado interceptaciones telefónicas de manera ilegal pero dentro de las investigaciones no hay un solo párrafo que lo acuse de genocidio, menos de apoyar grupos armados que atentaran contra la vida de los mismos ciudadanos franceses, delitos por los cuales si es acusado e investigado el ex presidente de Colombia Álvaro Uribe.
A Sarkozy nadie lo acusa de ser un terrateniente, menos de haber cambiado el uso del suelo para beneficiar económicamente a sus hijos, a Álvaro Uribe Vélez, sí.
Sarkozy no modificó la Constitución o la ley para su beneficio propio, Álvaro Uribe Vélez, sí. Nicolas Sarkozy no tiene grandes haciendas, su padre nunca tuvo un helicóptero, y mucho menos tiene un hermano en prisión por delitos de homicidio y colaboración con grupos terroristas. En cambio, Álvaro Uribe Vélez, sí. Es dueño de grandes haciendas y sus hijos propietarios de centros comerciales, modificó la Constitución Política de 1991 para hacerse reelegir. El helicóptero de la familia Uribe fue encontrado en el laboratorio de Tranquilandia y Santiago Uribe hermano de Álvaro Uribe Vélez es acusado de conformar y dirigir el grupo paramilitar los doce apóstoles.
En nada se parecen los delitos de Nicolas Sarkozy a los de Álvaro Uribe Vélez, no por ello deja de ser culpable, pero tampoco en nada se parece la justicia de Francia a la colombiana.
Nicolas Sarkozy tiene en estos momentos seis (6) procesos judiciales, Álvaro Uribe Vélez 293 y solo uno de ellos ha podido avanzar. Es bien sabido que en los Estados Unidos Uribe tiene inmunidad presidencial, de no ser así, muy seguramente ya habría sido procesado por delitos de narcotráfico pues una publicación de archivos secretos del departamento de estado americano reveló hace unos años que el ex presidente ocupó el puesto número 82 en la lista de capos más importantes de los años 80 y en ese mismo informe se le acusaba de «ser un senador colombiano que trabajaba para el cartel de Medellín».
Mientras a Nicolas Sarkozy la justicia francesa lo condenó a tres años de prisión, lejos esta de que en Colombia a Álvaro Uribe lo lleguen a condenar por alguno de los 293 procesos abiertos, pues como lo dijera el ya fallecido alias «Popeye», «Uribe es el dueño de Colombia, el hombre más poderoso y peligroso del país».
Solo nos resta cruzar los dedos, no solo para que lo puedan condenar, sino para que mientras denunciamos no seamos asesinados como es la costumbre en Colombia de matar a todo aquel que decide informar.