Mediante un comunicado público las Autoridades Indígenas de la Asociación Orewa, denunciaron los hechos de violencia y violación de los derechos humanos que ejercen los grupos armados ilegales contra las comunidades indígenas del departamento de Mojaudo y Playa Blanca, del municipio de Bojayá.
Según la denuncia, el día viernes 22 de enero de 2021, aproximadamente a las 10:00 a.m, 16 miembros de la comunidad, entre ellos el gobernador, docentes y la guardia indígena, inspeccionaban su territorio, cuando fueron retenidos por hombres armados pertenecientes a las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) en el sitio denominado Boca de Quebrada Tierra. En ese mismo momento también fueron retenidas tres mujeres, una de ellas en estado de embarazo, ellas fueron amenazadas con armas de fuego, con el fin de que suministraran una información que ellos requerían.
Además de esto, llegaron a la comunidad y ahí revisaron casa por casa, se llevaron alimentos e, incluso, obligaron a una de las familias indígenas a cocinar para ellos.
En la comunidad de Mojaudo, existe miedo, preocupación por la amenazas directas a tres docentes quienes son: Grimaldo Palacios, Humberto Palacios y Abisildo Palacios, quienes son acusados de ser auxiliadores de la guerrilla del ELN.
Alertamos de esta situación porque las Comunidades de Mojaudo conformada por 63 familias y Playa Blanca conformada por 25 familias, en este momento se encuentran en confinamiento total, no hay libertad de movimiento en la zona, lo que provoca escasez de alimentos, hay siembra de minas antipersonales en los sitios de cacería y recolección, además, la comunidad sufrió señalamientos y maltrato psicológico, lo que provoca que no exista tranquilidad entre los Embera de este territorio.
Para terminar, las Autoridades Indígenas exigieron al Gobierno Nacional, departamental y local para que realice acciones urgentes de protección colectiva para los territorios indígenas del departamento del Chocó, de manera concertada con las autoridades indígenas, para hacer frente a los grupos armados que generan un grave riesgo y amenaza a la vida y tranquilidad de las Comunidades Indígenas.
A los grupos armados, respetar y excluir a la población indígena de la confrontación armada, los territorios indígenas son sagrados y no deben ser usados para sembrar minas antipersonas.
A la Defensoría Regional del Chocó, a la Unidad Administrativa Especial de Atención y Reparación Integral a las Víctimas (UARIV) de Quibdó Chocó, para darle prioridad a la las familias que se encuentran en la situación mencionada.
Medidas de protección urgente para salvaguardar la vida de nuestros docentes amenazados por los actores armados.
Solicitamos e instamos a los organismos de derechos humanos nacionales e internacionales, al alto comisionado de naciones unidas para los derechos humanos, al alto comisionado para la paz, a la comisión interamericana de DD. HH, a la dirección de derechos humanos de la vicepresidencia, a la procuraduría general de la nación a visibilizar las violaciones de los Derechos Humanos, que ponen en riesgo a los miembros de nuestras Comunidades indígenas.