“Se oyen las sirenas echadas a correr es la policía que te quiere coger.
Corres por las calles tienes que escapar, balas y pelotas tiran a matar a mi pueblo sin piedad”
RIP Grupo de punk
¿Qué anoche asesinaron a dos jóvenes en puerto resistencia Valle del Cauca? Los asesinaron por luchar y estar inconformes con su realidad y el futuro que las políticas de este gobierno corrupto, empobrecedor y asesino tiene para ellos.
¿Qué el 13 de mayo, el día en que se le apareció la virgen de Fátima a los tres pastorcitos, se le apareció a una niña de 17 años en Popayán en las horas de la noche cuatro hombres vestidos de agentes ESMAD? los cuales la detuvieron por estar grabando los abusos de autoridad, además de ultrajarla, bajarle los pantalones y finalmente violarla; ella no aguanto ese amargo suceso y al otro día tomo la decisión de suicidarse.
¿Qué días antes paramilitares disfrazados de “personas de bien” montadas en camionetas de alta gama estaban escoltados como se ve en algunos registros de video por la policía nacional? Pues estas gentes de bien dispararon a la MINGA INDIGENA del cauca e hirieron a 8 comuneros solo porque supuestamente los indígenas no podían entrar a ese territorio porque es ajeno y por ende no se podían movilizar en el marco del PARO NACIONAL que se sostiene desde el pasado 28 de abril
¿Qué hasta la fecha según cifras de la defensoría del pueblo, entidad encargada de ser garante de los DDHH de los ciudadanos en todo el territorio nacional, van 24 muertes de personas participantes en las protestas? y ¿Qué el gobierno nacional sale en medios de comunicación oficiales, que por cierto solo desinforman, atribuyendo estos asesinatos a supuestas estructuras armadas ilegales infiltradas en las marchas solo para limpiarse las manos y quedar como un buen gobierno? Definitivamente aquí en Colombia es evidente que no solo los grupos ilegales asesinan al pueblo. También hay un gobierno asesino y genocida, que manda su fuerza pública vestida de civil para que disparen y así masacrar al pueblo en las calles, podemos ver que solo entre el 28 de abril y el 1 de mayo del año en curso, según la ONG Temblores, se registraron 940 casos de violencia y abuso policial, 4 casos de abuso sexual en donde las mujeres agredidas se encontraban bajo “custodia y protección” de la policía nacional, 672 detenciones arbitrarias y 21 homicidios; también se registraron por lo menos 18 ataques a la prensa y detenciones o impedimento para que personal de DDHH pudiera acceder a las zonas de fuerte confrontación entre manifestantes y fuerza pública. En medio de la horrible noche, que lleva ya 24 largos días, las denuncias de marchantes que son víctimas de hostigamiento, intimidación y persecución por parte de sujetos extraños no paran.
Todo lo anterior parecería sacado de un cuento de ficción dirán unos, que están mediatizados y controlados por los medios oficiales que adornan con propaganda el acto genocida producto de la orden del presidente, el general Zapateiro y el Ministro de Defensa, otros que se hacen llamar “gente de bien” podrían decir que es una exageración y que son berrinches de vagos inconformes. Pero no, desafortunadamente esta es la realidad que hoy vive un país de por lo menos 50 millones de habitantes en donde de esos 50 millones, 22 millones de personas según cifras del DANE están en pobreza y sobreviven con menos del salario mínimo establecido; más exactamente con 320 mil pesos mensuales.
¿Como no va a estallar esta situación? Si de esos 22 millones de personas 8’376.463 son víctimas del conflicto armado según la revista portafolio. Obvio están cansadas de ser victimizadas de los grupos armados ilegales que operan en diferentes territorios del país, ahora para tener que ser revictimizadas por las políticas económicas y de muerte neoliberales del gobierno de Álvaro Uribe y su sucesor Iván Duque, ya que aquí hay una guerra multidimensional que no cesa.
Entender esta crisis política y social, que hoy atraviesa uno de los países más ricos en cuanto a recursos naturales de esta parte de la región de Latinoamérica, Pasa por entender que lo que hoy sucede es producto de las políticas que históricamente ha diseñado el mal gobierno que caracteriza a este país. Un gobierno oligarca y burgués que ha gobernado a favor de la clase alta, los grandes banqueros, los gremios empresariales y claro las multinacionales. Un gobierno que genera impuestos para los pobres y subsidios para los ricos, que diseña, impulsa y fortalece políticas que desfinancian la educación y convierte la salud en un negocio para pasar a financiar la guerra que desangra los campesinos y desalojan las montañas.
Hoy Colombia se viste de resistencia y de lucha, al son de los tambores, de las batucadas, las gaitas y de las chirimías, hoy las calles de mi país se llenan de ríos de gente que exigen a viva voz vida digna para el pueblo y castigo para los gobiernos corruptos e impunes.
Colombia hoy se llena de indignación y se organiza en medio de la rabia, una rabia contenida y con sentido, una rabia justa y digna. !Servicios públicos domiciliarios! grita doña María desde el balcón hondeando la bandera tricolor, pensión y vejez segura dice la cartelera de don Carlos, allá de pie en la terraza de su casa, educación de calidad canta Danielita al son de su cacerola, acceso a una salud digna reclama Lucia que hoy se moviliza con su hijo discapacitado en brazos. Hoy este pueblo no marcha y llena de gente sus calles por una reforma tributaria mal llamada ley de la solidaridad sostenible, la cual pretendía seguir acabando con la dignidad del pueblo y seguir llanando de privilegios la burguesía, eso solo fue la gota que reboso la copa. Hoy mi pueblo marcha porque se hace necesario cambios urgentes y estructurales. Si bien en la actualidad las instituciones del estamento están fortalecidas, gracias a la impune corrupción que reposa dentro de su estructura, la legitimación de estas por el pueblo es débil, hoy el ciudadano y la ciudadana no creen en el congreso, no creen en la fuerza pública y menos creen en este gobierno servil y arrodillado; esto da cuentas de la crisis y el descredito que hoy está atravesando el estado colombiano como institución.
El llamado es a seguir fortaleciendo la lucha digna en las calles seguir tumbando sus reformas y las políticas nefastas de este gobierno. Hacer pedagogía para fortalecer la cultura política y critica fundamental para una sociedad consciente de su realidad y capaz de transformar la misma. Hoy el pueblo sale de forma intergeneracional, intercultural e interétnico racial a la lucha. La esperanza llena los corazones de los más desprotegidos y la mano del opresor se desmorona y debilita, por el canto de las cantaoras del pacifico, por las luchas de las maricas que hoy gritamos a viva voz que tenemos más cogones que el presidente Duque, por las mujeres que hoy derriban el sistema patriarcal en sus vidas, por esas medres de la candelaria y de Soacha que hoy todavía reclaman sus hijos. Hoy la fuerza se hace mano a mano, hombro a hombro, piedra a piedra derribamos al opresor.
La horrible noche no termina y a mi pueblo en medio de la revuelta lo asesinan, el levantamiento se hace firme y la dignidad es nuestra insignia, nuestra mirada sigue viva en nuestros corazones la memoria de nuestros muertos se hace llama viva. La victoria nuestra y nuestro es el pueblo, que viva la victoria para el pueblo.
Thomás Dupuert
Artista y activista social y popular