• El Jefe de Estado rechazó los recientes hechos de violencia ocurridos en los municipios de Argelia y Buenos Aires, en el departamento del Cauca, al igual que los presentados en Arauca y Putumayo en la ceremonia de ascenso de oficiales del Ejército Nacional en la Escuela de Cadetes José María Córdova.
• El Presidente fue enérgico en señalar que la paz “no puede ser ingenua” y que, por lo tanto, “el diálogo no es para matar jóvenes. El diálogo es para hacer vivir a la juventud colombiana. No tiene otro propósito. Si lo que vamos a empezar implica la muerte en cadena de jóvenes, no tiene sentido. Nuestra juventud no está para ser sacrificada”.
• Igualmente fue enfático en que “no vamos a dar permiso para desarrollar economías ilegales que, finalmente, traerán más muerte, más sangre. O se aprovecha el diálogo para salir de las armas, de la violencia, o no hay”.
El Presidente Gustavo Petro advirtió este martes que cuando el Gobierno del Cambio llama al diálogo, a la reconciliación y a construir una Paz Total, “nosotros no estamos dando permiso para traquetear. Estamos dando un permiso para acabar definitivamente la violencia”.
En la ceremonia de acenso de oficiales del Ejército Nacional, el Jefe de Estado expresó que “nosotros, cuando estamos hablando de diálogo, no estamos dando permisos para lo ilegal. Estamos dando permisos para hablar. Pero tiene que haber una voluntad”.
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En su intervención, ante los 280 hombres y mujeres que ascendieron al grado de subtenientes del Ejército, el Mandatario añadió que “no puede en la mente de las personas que hoy ejercen violencia haber un espacio creyendo que una opción de diálogo es una opción para aprovechar en el sentido de aumentar las condiciones de construcción de una economía ilegal”.
En el campo de paradas de la Escuela de Cadetes José María Córdova, en el occidente de Bogotá, el Presidente Petro enfatizó que “no vamos a dar permiso para desarrollar economías ilegales que, finalmente, traerán más muerte, más sangre. O se aprovecha el diálogo para salir de las armas, de la violencia, o no hay”.
Por el contrario, dijo: “Estamos dando un permiso para acabar definitivamente la violencia y pasar a territorios que, como en el caso de Buenaventura, se puedan construir con una visión común de prosperidad, de dejar la exclusión del territorio colombiano”.
Rechazo a recientes actos de violencia
En su discurso, el Gobernante rechazó los recientes hechos de violencia ocurridos en los departamentos en Arauca y Putumayo.
En ese sentido indicó que “estamos hablando de una planificación que –por las informaciones que he recibido– tenía como base el criterio de que allí tenía que abandonar el territorio la Fuerza Pública”.
Por esa razón, afirmó: “¿Por qué debe salir el Estado de esa zona? ¿Por qué un proceso de paz tendría que implicar que saliera el Estado? Y peor aún, ¿por qué se podría pensar que el Estado tendría que salir, cuando ni siquiera hay un proceso de paz, sino el uso del territorio para traquetear? Pues eso no se puede esperar de este Gobierno”.
Eficacia para lograr la paz
Aunque reiteró que “la paz, por tanto, en medio de la violencia, en mi opinión, sigue siendo importante, sigue siendo la ilusión de Colombia, sigue siendo la única posibilidad real de construir una nación”.
El Presidente fue enérgico en señalar que la paz “no puede ser ingenua” y que, por lo tanto, “el diálogo no es para matar jóvenes. El diálogo es para hacer vivir a la juventud colombiana. No tiene otro propósito. Si lo que vamos a empezar implica la muerte en cadena de jóvenes, no tiene sentido. Nuestra juventud no está para ser sacrificada”.
En ese orden de ideas, dijo, “lo que yo estoy pensando como Presidente de Colombia no es sacrificar una generación de jóvenes, como tantas, en medio de un conflicto y un desangre”.
A lo cual, concluyó: “No es un diálogo por diálogo. Es un diálogo para la eficacia. Y la eficacia consiste en dejar la economía ilegal y en dejar la violencia. Lo demás es retórica, discursos. En la acción política, además de la retórica, lo que necesitamos esencialmente es eficacia y si se trata de paz, la eficacia consiste en dejar de matar, en dejar de traquetear, en dejar definitivamente la violencia”.