En un importante acto para la comunidad afrodescendiente del Micay, en el departamento del Cauca, el Gobierno Nacional, a través de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), hizo entrega material del título colectivo que certifica la propiedad de 28.417 hectáreas al Consejo Comunitario Afrorenacer del Micay.
La ceremonia contó con la presencia de la Vicepresidenta Francia Márquez, quien participó activamente durante la jornada de Gobierno con el Pueblo en el Litoral Pacífico. Este título de tierras, ubicadas estratégicamente entre los municipios de El Tambo y Timbiquí, se erige como un paso fundamental hacia la consolidación de la identidad y la autonomía de la comunidad.
La extensión de tierra otorgada beneficia directamente a 262 familias que representan a 609 personas en total. Estas familias, que han soportado el peso del desplazamiento forzado en el pasado, ahora ven reconocido su derecho ancestral sobre la tierra que habitan, marcando un capítulo de esperanza y resiliencia en su historia.
En 2015, la comunidad presentó su solicitud de titulación colectiva ante el extinto INCODER, un proceso que finalmente se materializó en 2023 gracias a la adjudicación de la ANT. El territorio, conformado por once veredas pobladas mayoritariamente por la comunidad negra, se convierte en un símbolo de resistencia y perseverancia.
El director de la Agencia Nacional de Tierras, Gerardo Vega Medina, destacó la importancia de esta entrega al señalar: “Son más de 28.000 hectáreas que benefician a las familias ubicadas en el Cañón del Micay, familias que en el pasado fueron desplazadas y que esperamos que puedan retornar. Desde hoy, el Consejo Comunitario Afrorenacer del Micay ya puede planificar cómo será el desarrollo de este territorio para la producción de alimentos, así como para la conservación ambiental y cultural”.
El territorio, marcado por once veredas que han sido hogar de la población negra durante siglos, permite no solo la planificación de proyectos productivos sino también la preservación de tradiciones y prácticas ancestrales que han perdurado a lo largo de casi tres siglos.
Amparo Angulo, lideresa del Consejo Comunitario del Micay, expresó su felicidad: “Hoy estamos felices porque por fin este territorio es nuestro, después de tantos años de lucha y de dolor por cuenta del desplazamiento que sufrimos. Ahora le podemos dejar a nuestros hijos la tierra para cultivarla y protegerla”.
Este título no solo asegura la propiedad de la tierra sino que también brinda seguridad jurídica en la defensa de los derechos colectivos. Es un escudo frente a actividades extractivas y solicitudes de explotación que podrían amenazar la integridad del territorio y sus habitantes.
Con esta entrega, el Consejo Comunitario Afrorenacer del Micay inicia un nuevo capítulo en su historia, uno que promete ser guiado por el arraigo a la tierra, la preservación cultural y la construcción de un futuro sostenible para las generaciones venideras.
Fotografía: Daniel Castaño | Agencia Nacional de Tierras