La misión del Presidente de la República y del poder Judicial es empoderar a la justicia y lograr que sea barrera real contra el crimen: Gustavo Petro
“Colombia va hacia una democracia profunda, hacia aplicar a cabalidad la Constitución del 1991”
“Espero de todos los magistrados y de mucha gente valiente ha defendido estas mismas tesis desde las instituciones judiciales, la mayor de las ayudas en ese sentido”.
El Presidente Gustavo Petro Urrego invitó este martes a los miembros de la Rama Judicial a “lograr que la justicia colombiana pueda ser una barrera real contra el crimen” y a evitar “el camino que nos llevaría, indefectiblemente, a la disolución de la Nación y a la posibilidad de una profundización de la violencia”.
En el acto de posesión del magistrado de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia, Jorge Hernán Díaz Soto, el jefe de Estado aseguró que “en esas tareas, al Poder Judicial le corresponde una enorme responsabilidad, y como Presidente de la República es mi deber fortalecer esa posibilidad”.
Evocando situaciones vividas en el país como, “la extinción de todo un partido político sólo por ser socialista, la Unión Patriótica”, y las denuncias que hizo siendo congresista, el mandatario señaló que, mediante investigaciones judiciales, nacionales e internacionales, se evidenció una articulación entre algunos sectores del Estado y narcotraficantes y un acercamiento del crimen al poder político.
“Investigaciones, incluso mías –siendo parlamentario y senador– denunciamos cómo ese narcotráfico se estaba tomando sectores enteros del Estado colombiano”, agregó el Presidente Petro.
“El crimen, cuando se toma el poder político, potencia el crimen y del homicidio pasa al genocidio”, subrayó.
Gracias a esa labor desplegada por la Corte Suprema buena parte de la clase política debió responder ante la justicia por aparecer en las nóminas de dirigentes del paramilitarismo.
“A mí me tocó ver cómo el 35 por ciento del Senado de la República, mis colegas, iban a la cárcel por haber consentido, auspiciado, organizado el paramilitarismo”.
El Presidente planteó que aceptar el crimen en el poder es dejar de hacer justicia. Lo contrario o profundizar la democracia. “Esas son las decisiones que, quizás, históricamente, se están tomando en este momento”.
En estos casos, es fundamental proteger al Poder Judicial, empoderar a la justicia, profundizar la democracia y “lograr que los cuerpos de investigación del Estado, la Fiscalía General, las instancias que la Constitución ha creado y colocado para ese tema, puedan en realidad ser barreras contra el crimen”, añadió.
“La convocatoria que yo hago es que una de las piedras angulares para fortalecer la democracia es precisamente fortalecer la justicia. No permitir, por nada del mundo, que el crimen entre a la justicia. Y espero de usted, magistrado (Jorge Hernán Díaz Soto), y de todos los magistrados presentes, y los que habrá en el futuro, y de los anteriores, y de mucha gente valiente que ha defendido estas mismas tesis desde las instituciones judiciales, la mayor de las ayudas en ese sentido”, concluyó el mandatario.